El Levante UD se fue con un disgusto de Butarque, donde mereció al menos el empate. Pagó muy cara su perezosa puesta en escena. Encajó un gol muy pronto y a partir de ahí se hizo dueño del partido. Tuvo mucho tiempo para empatar, incluso remontar, pero disparó con escopeta de feria.

El Levante UD salto al campo hecho un flan, absorto, como si el partido no fuese con él. Pagó su desorganización táctica con un gol tempranero que retrató sus peores defectos. La desastrosa jugada comenzó con el fallo de Luna al sacar una falta estudiada en la pizarra. El Leganés armó el contragolpe, Aitor y Bardhi no se entendieron en el despeje del balón fuera del área y Óscar lo cazó para enviarlo por alto a la portería. No fue porque el conjunto de Pellegrino no había avisado antes: un remate al larguero y un disparo de Braihtwaite ante un rival desbordado por la puesta en escena del Leganés. Un desastre.

Tardó un ratito en reaccionar el equipo de Paco López, que alineó otra vez a Jason, en quien es evidente que confía pese a su anunciada marcha al Valencia CF. Suya fue precisamente la primera ocasión del Levante UD, clarísima. Bardhi envió un centro entrelíneas a Mayoral, este apuró la línea y sirvió a Jason, que entraba al remate. Cuéllar evitó el empate en una acción que pudo cambiar el partido.

La ocasión supuso un punto de inflexión en el desarrollo del juego. El Levante UD se metió en el partido y pasó a controlar la pelota. Fue extraño ver a Jason en el medio campo junto a Campaña y a Bardhi, mientras que Simon y Luna ocuparon las bandas. El futuro valencianista ocupó el puesto del ausente Rochina.

Con el partido controlado, el Levante UD comenzó a de verdad a intimidar a su rival, que para entonces ya estaba más pendiente de defender y de contragolpear que de otra cosa. Con el equipo azulgrana volcado sobre el área rival, Bardhi protagonizó una de las acciones de la noche. Se libró del marcaje del defensa con un ruleta, al borde del área, y envió un disparo seco al poste. Una lástima, porque la jugaba fue preciosa.

La segunda mitad comenzó con otra ocasión clarísima del Levante UD. El centro envenenado de Simon al área pequeña, con rosca, no pudo ser rematado por Bardhi ni Mayoral en el segundo palo. La pelota hizo carambola y salió despedida. La buena noticia era que el Levante UD era el dueño del juego. Que Simon había entrado en juego, con una participación frecuente desde la derecha, y que Campaña dirigía con excelencia el juego.

El Leganés, el equipo que más tiempo lleva sin perder en su estadio, espabiló ante el acoso granota. Eso de permanecer invicto desde septiembre tiene sus razones. Es un conjunto muy bien trabajado por Pellegrino y su cuerpo técnico. Un conjunto disciplinado, por encima de todo.

El Levante UD creaba peligro, pero le faltaba la puntilla. No fue una gran noche para Morales, por ejemplo, con mucha presencia en el área, pero poco acertado en la decisión. Le faltó más entendimiento con Mayoral, cuya calidad es indiscutible.

Simon ganó presencia con le paso de los minutos. Llevó peligro por su banda y, por momentos, el Levante UD rozó el empate con claridad. Paco López dio entrada a Coke, primero, y a Róger, después. Con el torrentino buscó más puntería en el área. Disfrutó de una opción de marcar, con un remate de cabeza. El Levante UD encontró la portería, pero el árbitro anuló la acción por considerar que Mayoral molestó al portero en el salto antes del remate de Coke. ¿Entra el VAR en estas acciones? Estamos en marzo y menudo lío es lo del VAR. Alguien debería explicar mejor cuándo se aplica.