Óscar Duarte está a un paso de convertirse en el último refuerzo del conjunto granota para la próxima temporada. El central ha aparecido como una oportunidad de mercado después de quedar libre el pasado 1 de julio y las posturas entre el club y la entidad están muy próximas. De esta manera, el central de consenso aparece para dar un plus en varios aspectos en los que el Levante se mostro escaso la temporada pasada: el juego aéreo y los centros laterales. El internacional de Costa Rica no ha tenido excesiva continuidad en las últimas temporadas, pero espera recuperar su mejor versión en el Ciutat de València. Esa que le llevó a ser una de las caras más importantes de la selección 'tica' en el Mundial de 2014.

Después de esa cita, Duarte siguió creciendo en Brujas, donde aterrizó en 2012. Un año y medio después del Mundial de Brasil al central le llegó la gran oportunidad de su carrera: el salto a LaLiga. En el Espanyol se hizo un hueco como titular indiscutible en los primeros seis meses (llegó en invierno). Pero en la 2016/17 llegaron los problemas con las lesiones. Y por sus condiciones, Duarte es un futbolista que necesita estar al máximo para explotar sus virtudes. En un buen tono físico, Duarte es un jugador fuerte y contundente. Un central de choque, de salto y de juego aéreo. En definitiva, mejora el nivel actual de la defensa granota, que la temporada pasada sufrió precisamente en ese escenario.

Por sus características, Duarte es un jugador que se siente muy cómodo en defensa cerrada, pero que también está capacitado para defender a campo abierto. Eso encaja con la necesidad del equipo, que la temporada pasada, sobre todo en las segundas partes cuando el partido se abría, se veía superado por el ataque rival en muchas ocasiones. El central 'tico' es un jugador que encaja también en el perfil por su capacidad para rendir en varias posiciones y es que tanto en defensa de cuatro como de tres se ha asumido siempre como un buen marcador. De hecho, su figura cuadra por su espíritu combativo más que por otras facetas, como la salida de balón, en la que es un central más limitado.