Dos de los ausentes en el partido ante el Cádiz -no disputaron ni un solo minuto y de hecho el delantero ni tan siquiera fue convocado- fueron Rúben Vezo y Sergio León, y en ambos casos la situación empieza a ser límite hasta el punto de que el club tiene como prioridad absoluta darles salida, pese a la dificultad que ello entraña, por motivos tanto deportivos como económicos. Se trata de dos de las licencias que se ‘comen’ un mayor volumen de masa salarial y el central ha pasado ahora a un cuarto plano (los titulares en Cádiz fueron Duarte y Róber Pier, y por delante de ellos incluso puede estar el ahora lesionado Postigo), mientras que el atacante desde su llegada nunca ha sido titular en la punta de lanza.

En el caso de Vezo, en el club ya había cierto malestar con el jugador por sus aumentos y descensos de ‘rendimiento’, pero la situación se vio agravada a apenas unos días de iniciarse la competición. Fue tras acabar el partido el Elx cuando el futbolista -que no fue titular en aquel último amistoso, en el trofeo Festa d’Elx- y el técnico tuvieron una discusión ante buena parte del resto de integrantes del plantel y del cuerpo técnico. La cosa no pasó a mayores, pero ambos intercambiaron pareceres de forma airada. Si a eso se añade que se trata de un futbolista del que ya se quería prescindir -de hecho la empresa de representación que lleva al luso en cierto modo se comprometió a traer una oferta por el jugador que dejase dinero en caja, al margen de permitir ahorrarse su ficha-, el resultado es que, aunque se trate de una decisión técnica, el jugador en Cádiz no jugó ni un minuto y la cosa está tensa. En Orriols están preparados para acometer la llegada de otro central de menos caché, pero se espera que de mayor rendimiento, cuando llegue esa oferta que todavía se espera.

En el caso de Sergio León la situación es la misma prácticamente que el año pasado a estas alturas, cuando desde el club ya querían encontrarle destino al considerar que su rendimiento no había sido acorde a su salario. Sin embargo, la situación con el atacante andaluz este año se ha agravado un poco más debido a los reajustes que se tuvieron que hacer la pasada campaña con sus condiciones contractuales. Por las mismas cuestiones de equilibrio financiero que ahora han impedido que de momento tengan dorsal de la primera plantilla jugadores como Cárdenas, Cantero y alguno más, en su día se pactó con el jugador que parte de sus emolumentos del pasado curso se cobrarían en este y eso hace que esta campaña deba percibir una ingente cantidad en concepto de ficha, una cantidad que además ya es imposible aplazar en su caso puesto que acaba contrato en junio de 2022.

Al cierre de esta edición en el club no tenían ninguna oferta en firme sobre la mesa por ninguno de los dos jugadores, pese a que algunos clubes sí que han interesado por la situación de ambos.