Roberto Soldado fue una de las víctimas más graves dentro de la plaga de lesiones que se instauró en Orriols desde los primeros compases de la pretemporada. Durante las semanas de preparación pasó el corte físico, pero en el primer compromiso liguero de la 21/22, el ‘16’ sufrió una lesión en los isquiotibiales y en el aductor derecho que le borró del mapa competitivo. Mes y medio después, el delantero valenciano activa la cuenta atrás para regresar al ruedo tras el oasis de sus dolencias, fuerte de mente y preparado para, tal y como deslizó Paco López en la primera jornada, hacer tándem en la punta de ataque con Roger Martí.

El plan de recuperación de Roberto Soldado va viento en popa. Su evolución ha dado los pasos adecuados y el optimismo está latente. La previsión es que el atacante esté disponible para su entrenador una vez finalice el parón de selecciones, en un periodo que se antoja trascendental para recuperar efectivos que ayuden al Levante a salir de la espiral de resultados negativos. De hecho, el atacante lleva aproximadamente dos semanas realizando ejercicios con balón y trasladando buenas sensaciones, y la semana que viene está previsto que vaya entrando en la dinámica del grupo. Noticias positivas, en medio de un estado de crisis, que se unen a las ganas que tiene el punta de estar en plenas condiciones físicas para volver a estar preparado.

Soldado, quien ha visto cómo el conjunto de Orriols se ha sumergido en las posiciones más bajas de la clasificación mediante múltiples factores, tiene muchas ganas de ayudar a los suyos, y su entrega, carácter y capacidad goleadora será un golpe de aire fresco para un equipo necesitado de estímulos.

Levanta expectación

La vuelta del delantero valenciano, sin duda, levantará expectación entre la afición levantanista. Fue la incorporación más destacada, de las cuatro que hizo la dirección deportiva durante el pasado mercado de fichajes, por muchos factores: por su edad, por la apuesta económica que realizó la secretaría técnica y, sobre todo, por sus precedentes de cara a portería. Su llegada a Granada fue toda una declaración de intenciones para demostrar que todavía le queda cuerda para rato, haciendo veinticinco goles y dando nueve asistencias en LaLiga Santander, y siendo uno de los principales artífices de que el cuadro nazarí lograse una clasificación para la Europa League, inédita en toda su historia. Roberto Soldado cuenta las horas para volver y darlo todo para que el Levante consiga la permanencia en Primera División.