Tras una semana en la que el Levante entrenó bajo la atenta mirada de Alessio Lisci mientras se resolvía el acuerdo con Javier Pereira para que se convirtiera en el nuevo entrenador granota, hoy se iniciará, casi de manera definitiva, una nueva era en Orriols a la espera de que el técnico pacense, junto al club levantinista, pueda resolver los trámites que le impiden volar desde China hasta València. Agustín Izquierdo, segundo entrenador, y Pedro López, técnico asistente, llevarán a cabo su primera sesión de entrenamiento la Ciudad Deportiva de Buñol para preparar el encuentro trascendental del próximo sábado ante el Getafe, jornada marcada en rojo desde que se inició el parón por compromisos internacionales y en la que se esperar tomar un rumbo más beneficioso para el equipo azulgrana.

Durante el tiempo que estuvo Alessio Lisci al frente del primer equipo, el preparador italiano se encargó, bajo la supervisión de lo que consideró Javier Pereira en consenso con Javier Navarro, miembro del cuerpo técnico que estuvo con la primera plantilla, de detectar los problemas y profundizar en cuáles eran sus soluciones. No obstante, el Levante comenzará una nueva semana de trabajo junto a los que serán, con permiso del exentrenador del Henan Yianje, sus supervisores. Los que trasladarán a los Morales, Roger, De Frutos y compañía la planificación de entrenamientos de cara al choque de este fin de semana en el Ciutat de València.

Sin embargo, uno de los puntos en los que enfocará Javier Pereira su aventura en la élite es en qué estado se encuentra su plantilla dentro del aspecto físico.