Alessio Lisci fue uno de los hombres más felices de la victoria frente al Huracán Melilla. El triunfo, más allá de la diferencia entre un equipo y otro, le refuerza de cara al partido frente a Osasuna. Encuentro en el que se jugará su continuidad pese a el pase a la siguiente ronda de la Copa del Rey le otorgue un plus de credibilidad. Sin embargo, no mira más allá. Lo que suceda a partir del domingo no depende de él, pero el italiano es consciente de que su trabajo tiene que respaldarle de cara al futuro. «A trabajar bien mañana y pasado y a hacerlo de la mejor forma posible el fin de semana contra le Osasuna. Cuando el árbitro pite el final ya veremos qué pasa. Nuestro objetivo es estar mentalizados en el día a día. Mi objetivo es hacer el mejor entrenamiento posible mañana», dijo.

Independientemente de cuál sea el devenir de Alessio Lisci, el entrenador granota consideró que dar pasos en la Copa del Rey será positivo para que la extensa plantilla que tiene el primer equipo pueda gozar de protagonismo y minutos. Sobre todo, para que estén enchufados en caso de necesidad. «Por el tipo de plantilla que tenemos, que es muy larga, es importante ir cuanto más lejos posible en esta competición para que todo el mundo pueda tener minutos y estar bien físicamente».

Por último, Alessio Lisci no dejó en el tintero lo importante que le supone al Levante volver a ganar un partido tras meses encadenando malos resultados y sensaciones. Además, confía en que la victoria sea un impulso para conseguir más de aquí en adelante. «El ganar ayuda a ganar. Hoy era importante, sobre todo salir fuerte desde el principio. Al equipo en el vestuario ya se le veía de otra forma. Ahora hay que seguir trabajando para que no sea la última», finalizó.