Tres semanas después de sufrir una rotura de grado 2 en el recto anterior del muslo derecho frente al Barcelona, Roger Martí está de regreso y preparado para luchar, hasta el último instante, por la permanencia en la élite del fútbol español. El ‘9’, a tres días para el enfrentamiento contra la Real Sociedad, estará listo para competir en punta de lanza y alimentar con goles el milagro, aún latente, de la salvación tras completar gran parte de la sesión matinal de ayer, marcada por la lluvia y el mal tiempo, en el Ciutat de València.

Una noticia que cayó como agua de mayo en el propio Levante, ya que tendrá a su disposición a una de sus máximas referencias en el tramo final de competición, al igual que más pólvora en una punta de ataque que no compensa su alta productividad con goles a favor. En el último enfrentamiento, el conjunto dirigido por Alessio Lisci, más allá de hacerlo en superioridad numérica, disparó a puerta siete veces de las veintidós que intentó probar a Giorgi Mamardashvili. De los tres partidos que se perdió el Pistolero, el conjunto levantinista anotó siete dianas (cuatro ante el Granada, dos contra el Sevilla y una frente al Valencia en Mestalla). Sin embargo, la presencia de Roger Martí en las cuatro finales que restan de LaLiga Santander será garantía de entrega, lucha y compromiso.

Pese a que el atacante no se encuentre en su mejor temporada en cuanto a números, el ‘9’ nunca ha dejado atrás sus señas de intentidad sobre el terreno de juego. Además, está plasmando una versión más asociativa en el que está siendo un curso aciago de cara a portería: cinco goles en veinticinco enfrentamiento ligueros.