Gabi Nunes mete al Levante en la final de la Supercopa (3-1)

El choque fue muy duro y tuvo que decidirse en el tiempo extra por la máxima igualdad que se vio durante los 90 minutos reglamentarios

Gabi Nunes mete al Levante en la final de la Supercopa (3-1)

Gabi Nunes mete al Levante en la final de la Supercopa (3-1) / Levante-EMV

Pau Pardo

El Levante UD jugará la final de la Supercopa Femenina gracias a los dos goles de Gabi Nunes en la segunda parte de la prórroga. La atacante ingresó en el tramo final y acabó siendo decisiva para llevar a las granotas a la finalísima en la que se medirá al que pase en el choque entre Real Madrid FC Barcelona. El choque fue muy duro y tuvo que decidirse en el tiempo extra por la máxima igualdad que se vio durante los 90 minutos reglamentarios.

El partido arrancó a un ritmo endiablado en el que el Levante aprovechó para adelantarse en el marcador. Fue a los cinco minutos del pitido inicial y desde el punto de penalti en una acción no exenta de suspense. Mayra Rodríguez, jugadora más peligrosa de las levantinistas, firmó una gran internada en la que forzó a Andrea Medina a arriesgar en la entrada y cometer penalti. Después de revisarlo con el VAR, la colegiada decidió decretar la pena máxima que se encargó de transformar Ángela Sosa con un disparo ajustado al poste inapelable para una Lola Gallardo que sí leyó sus intenciones, pero que no llegó al cuero.

Las atléticas trataron de reaccionar a través de Eva Navarro, la internacional y exgranota fue el principal foco de peligro de las suyas por banda, pero el Levante se mostraba tranquilo gracias al tanto inicial. El paso de los minutos, no obstante, no hizo sino incrementar el peligro colchonero y obligar a Núria Mendoza a realizar grandes intervenciones bajo los palos para evitar el tanto. Y tanto fue el cántaro a la fuente que finalmente se rompió. Fue gracias a Ajibade, que después de recibir y controlar un buen envío de Leicy Santos ensayó un golpeo seco y ajustado al palo largo.

El Levante buscó la reacción con alguna internada, pero la realidad es que el Atlético de Madrid supo aprovechar la inercia del gol para disfrutar de las mejores ocasiones antes del descanso. Mendoza se vio obligada a emplearse a fondo en varias ocasiones. Los minutos avanzaban y el olor a prórroga era cada vez más fuerte. Pudo resolverse antes, pero el VAR no decretó el segundo penalti a favor de las levantinistas y el choque se marchó irremediablemente a la prórroga.

En el tiempo añadido los nervios estaban a flor de piel. Un error podía ser casi definitivo y eso se notaba en las jugadoras. En la segunda parte se abrió todo y la entrada de Gabi Nunes fue clave, ya que marcó los dos goles de la victoria. Primero con un cabezazo inapelable y después con una gran acción en el área que definió ella misma.

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