Los poemas que Maria Ibars compuso a «l'ombra del Montgó» cobraron ayer vida en la calle de Dénia que lleva el nombre de la autora y que, deliberadamente o no, mira a la inspiradora montaña. Se cumplían 50 años de la muerte de la escritora. El ayuntamiento le rindió homenaje con un emotivo acto en el que leyeron sus poemas el alumno del colegio Raquel Payà (esta pedagoga fue hija de la escritora), Cristián Ferrer, así como la directora de este centro y los de los institutos Historiador Chabàs y Maria Ibars.

La concejala de Cultura, Pepa Sivera, recordó que, aunque nacida en Valencia, la escritora pasó su infancia y adolescencia en Dénia. Vivió en los barrios del Saladar y Baix la Mar y, en verano, se trasladaba junto a su familia a la casa de su abuela paterna en la partida dels Campusos, en la falda del Montgó. Aquella finca se llamaba Penyamar. El poemario más conocido de la autora es, precisamente, Poemes de Penyamar: a l'ombra del Montgó, de 1949. Maria Ibars contribuyó a dignificar el valenciano durante el franquismo. Deslizó en sus novelas la denuncia de la desigualdad de la mujer. Se la ha definido como autora naturalista y costumbrista. El Montgó cobra una fuerza capital en su fecunda obra. Es su paisaje sentimental. Nacionalista católica y de derechas, estuvo muy vinculada a Lo Rat Penat.