El congreso internacional La taifa de Dénia, una Florencia del siglo XI arrancó ayer con el objetivo de reivindicar el esplendor en el Mediterráneo de este estado independiente fundado por Muyahid. En la conferencia inaugural, el exdirector del Museo de Mallorca, Guillem Roselló-Bordoy, que es, además, asesor de los actos del milenio de la taifa, realizó una semblanza de Muyahid y de su sucesor, su hijo Alí. Antes, el director del Museo de Dénia, Josep A. Gisbert, subrayó que el congreso será «un diagnóstico» del momento en el que Dénia tuvo «más proyección en el mundo islámico y en el Mediterráneo». Por su parte, el catedrático de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad de Alicante, Francisco Franco Sánchez, subrayó que Muyahid hizo de Dénia una capital en la ciencia del Islam y trajo a los mejores lectores del Corán. En el siglo XI, de hecho, este reino vivió un momento de gran efervescencia cultural e intelectual. Recordó la importancia que para la investigación tuvo hace 30 años la publicación del libro La taifa de Dénia, de María Jesús Rubiera.