La familia de un paciente con secuelas de un ictus rechaza que le den el alta

El enfermo, de 55 años, está convaleciente de una operación de carótida y pide que se le lleve al hospital de daño cerebral

La familia de un paciente con secuelas de un ictus rechaza que le den el alta

La familia de un paciente con secuelas de un ictus rechaza que le den el alta

a. p. f. | dénia

Amadeo Alemany, de 55 años, no se siente con fuerzas para volver ya a casa. El pasado 21 de diciembre entró en el hospital de Dénia, que gestiona Marina Salud, por su propio pie. Se sentía mal. Sufrió un ictus. Hizo noche en el hospital. «El aparato de resonancias estaba roto y al día siguiente me llevaron a Gandia a hacerme la prueba», explicó ayer, junto a sus hermanas, en la habitación del hospital de Dénia. Amadeo llevaba por escrito lo que quería decir. Pero no pudo leerlo. El ictus le ha limitado la visión de un ojo; también le cuesta hablar. Sus hermanas afirmaron que no está para que le den el alta. Pidieron a Marina Salud que lo envíe al hospital público de la Pedrera, que es de crónicos y larga estancia y cuenta con una unidad de daño cerebral.

Amadeo, que está recién operado de la carótida (la tenía obstruida), teme sufrir una complicación. Además, vive solo y en Benirrama (en la Vall de Gallinera), a casi 40 kilómetros del hospital.

El hospital ya le dio el alta, explicó el propio Amadeo, el pasado 8 de enero. A las pocas horas, tuvo que volver por una recaída. «La neuróloga dijo entonces que siguiera ingresado hasta que me operaran», indicó el paciente.

La Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública se movilizó ayer para parar el alta. También reclamó que ingresen a este paciente en la Pedrera para que pueda recuperarse de las secuelas neuronales.

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