Marina Salud, que es la concesionaria de la sanidad en la Marina Alta, señaló ayer que el paciente tenía antecedentes de «carcinoma de esófago y de pulmón diagnosticados desde el año 1995» y que, por ello, se le administraban parches de morfina. Confirmó que el diagnóstico del 13 de febrero fue el de «acuñamiento vertebral», dado que dos días antes al enfermo se le había realizado un TAC que, al valorarlo los médicos de Urgencias, revelaba esa dolencia vertebral. Marina Salud apuntó que, además, el paciente estaba aquejado de dolor intercostal. Por ello, sostiene la concesionaria, se le colocó un corsé. Marina Salud defiende que ese diagnóstico fue acertado.