El PSPV y Compromís exigieron ayer a la alcaldesa de Dénia, Ana Kringe, del PP, que cumpla cuanto antes la sentencia que le obliga a readmitir al técnico de Normalització Lingüística que echó en enero de 2012. «Pedimos la reincorporación inmediata de este trabajador», indicó la socialista Elisabeth Cardona, que recordó que desde el primer momento su portavoz, Vicent Grimalt, advirtió de que el castigo al funcionario acabaría en el juzgado y le saldría caro al ayuntamiento.

El TSJ, además de anular el despido, obliga al consistorio a abonar al funcionario interino todos los salarios que dejó de percibir desde su despido. El tribunal también condena a costas al ayuntamiento.

El portavoz de Compromís, Josep Crespo, y el candidato a la alcaldía de este partido, Rafa Carrió, exigieron que ese dinero lo paguen de su bolsillo la alcaldesa y el concejal de Normalització, Vicente Chelet.

Crespo se mostró contento con el fallo. Él encargó al técnico el informe sobre la utilización del valenciano en la cartelería comercial (no se usaba esta lengua y había topónimos mal escritos). El funcionario advirtió en su informe de que el consistorio estaba incumpliendo la Llei d´Ús i Ensenyament del Valencià. Crespo hizo públicas las conclusiones del informe. Y el gobierno local echó al funcionario.