El Polvorí. Así se llama la partida de Benissa donde el consorcio de aguas de Teulada y el Poble Nou de Benitatxell espera encontrar el manantial que aplaque su crisis de suministro. El concejal de Infraestructuras de Teulada, Raúl Dalmau, se reunió ayer con el alcalde de Benissa, Juan Bautista Roselló (ambos son del PP). Del encuentro, salió un proyecto concreto de colaboración hídrica. Benissa cederá al consorcio de Teulada y Benitatxell unos terrenos municipales situados en el Polvorí (están cerca del polígono industrial de la Pedrera). Allí se efectuará un sondeo y se abrirá un pozo. Se sabe que en el subsuelo hay agua.
El caudal que se saque se utilizaría para abastecer el polígono de Benissa y para paliar la escasez de Teulada y el Poble Nou, municipios que han dejado atrás los cortes de suministro pero que ahora desaconsejan que los niños y los ancianos beban agua del grifo. Los niveles de cloruros y sodio son altos, dado que, tras suspender Xàbia la venta de agua de su desalinizadora, estos pueblos han tenido que inyectar en la red caudales de pozos salinizados.
El déficit de agua potable (Xaló y Llíber no la tienen desde abril) ha demostrado que el Consorcio de Aguas de la Marina Alta, creado en 1987 y reactivado hace ahora dos años, vuelve a naufragar. Cuando los acuíferos están a tope, todos los pueblos son muy solidarios, pero cuando la sequía aprieta se impone el sálvese quien pueda.
Sin embargo, el edil de Infraestructuras de Teulada y el alcalde de Benissa insistieron ayer en que urge crear un banco de agua comarcal. Mientras, el alcalde del Poble Nou de Benitatxell, Josep Femenia, sostuvo que la actual crisis del agua constata el «fracaso de la clase política». Femenia dijo que el gran manantial de la comarca está en la Vall d'Ebo y abundó en que el consorcio comarcal no funciona. «Vamos a reuniones a Alicante a mirarnos las caras y cobrar una dieta de 300 euros. Pero quien tiene agua no quiere estar».
Femenia se mostró confiado en que el suministro que realiza el consorcio de Teulada y Benitatxell (lo gestiona la empresa Hidraqua) recupere pronto una «calidad aceptable». Dijo que se hacen constantes analíticas para garantizar la potabilidad y que la empresa se gasta en este concepto 70.000 euros al año. «Ahora los parámetros de sal son elevados», apuntó cuando se le preguntó sobre la recomendación de que no beban agua de la red los niños y ancianos.
El munícipe lamentó que Xàbia suspendiera la venta de agua de la desalinizadora de un día para otro y sin previo aviso. «Hemos acumulado un déficit de 4.000 metros cúbicos al día, los 2.000 que no nos sirve Amjasa (la empresa pública de suministro de Xàbia) y los otros 2.000 del exceso de consumo». Con todo, Femenia subrayó que el consorcio de Teulada y Benitatxell ha reaccionado rápido. «Ha restablecido el suministro en cantidad. Ahora la empresa tiene la obligación de distribuir agua de calidad».
