La fiesta de bous a la mar es bien peculiar. La Asociación Contra la Tortura y el Maltrato Animal (Actyma) ha examinado con lupa los espectáculos que se celebraron durante la Festa Major de Dénia del pasado año. Y ha detectado posibles incumplimientos del decreto que desarrolla el Reglamento de festejos taurinos tradicionales de la Comunitat Valenciana y de la Ley de puertos. Este colectivo ha interpuesto una denuncia ante la Dirección Territorial de Gobernación y Justicia contra los responsables de los últimos bous a la mar, fiesta que está declarada de interés turístico nacional. Además, echa cuentas. Considera que en los 16 espectáculos (ocho días con sesiones de mañana y tarde) se pudieron cometer infracciones graves y muy graves, agravadas por la «trascendencia social» de estos festejos y «la negligencia» de los organizadores. La multa, según este colectivo, podría subir nada menos que a 4,8 millones de euros.

Esta asociación alude a una irregularidad que nace de la dificultad de definir dónde está el coso en la plaza que se instala en el puerto de Dénia. «Se colocan unas colchonetas y barcas hinchables en el mar, acordonando y limitando el espacio, junto a unas vigas flotantes, con la pretensión de crear barreras de un coso taurino marino lleno de espectadores y con muchos niños», se indica en la denuncia. Cada vez que el toro cae al agua, entra en ese «coso marino» que no cumpliría las condiciones de seguridad que exige la ley.

Este colectivo advierte de que en la plaza del puerto ni la policía local ni los voluntarios taurinos tienen autoridad alguna. La potestad es de la policía administrativa de puertos y del servicio marítimo de la Guardia Civil. De ahí que, sostiene esta asociación, los voluntarios no pudieran desalojar «a los menores de 16 años que se encontraban en el espacio marino donde los toros tenían acceso fácilmente».

La denuncia incide en la «mala praxis» al rescatar a los astados que han caído al mar. «Los métodos utilizados fueron: agarrar al animal por el aro del collar (con el peligro de asfixiarlo), atar mal la cuerda de sujeción y escaparse el toro varias veces y montarse encima del animal». Los especialistas que acuden con una barca a remos a guiar al toro hasta el corral se afanan en levantarle el ocio para evitar que trague agua y pueda ahogarse, lo que ha ocurrido en más de una ocasión. Es una tarea complicada que requiere pericia y fuerza.

«Vejaciones y maltrato gratuito»

Esta asociación también denuncia que en los festejos del pasado año, que tuvieron lugar entre el 4 y el 12 de julio, hubo participantes que desde la barrera agarraban al toro del rabo y le daban fuertes tirones. Interpreta que estas acciones suponían «vejaciones y maltrato gratuito» al animal. También asegura que en diversas ocasiones las reses sufrieron fuertes golpes incluso con palos. Y reclama a la conselleria de Gobernación que inicie los expediente sancionadores contra los responsables de los bous a la mar.

Esta fiesta es la de más tirón turístico de Dénia. Se celebra durante la Festa Major en honor a la Santíssima Sang. En realidad, los bous a la mar son el epicentro de esta celebración. De ahí que ni siquiera ahora, cuando gobiernan PSPV y Compromís, el ayuntamiento, que es el organizador de esta fiesta, se plantee suprimirla o someter su continuidad a un referendo. En la Marina Alta, también se celebran bous a la mar a finales de julio en Moraira y en septiembre en Xàbia.