En la Marina Alta, el adjetivo equidistante tiene una cierta connotación negativa. Esta comarca está equidistante de Valencia y Alicante. Es decir, que está igual de lejos de una ciudad y de otra. Todo queda a trasmano en una comarca que, además, tiene a Dénia como foco de atracción de infraestructuras. El sur no suele rascar bola.

Esa asimetría comienza a corregirse ahora en extinción de incendios. El parque auxiliar de bomberos de Benissa, construido por la Diputación de Alicante, se acabará antes de verano. De hecho, las obras ya están en su recta final. El diputado de Emergencias, Jaume Lloret, dijo ayer que este parque estará «equidistante» de los de Dénia y Benidorm. Dará, por tanto, servicio a un territorio al que a los bomberos les costaba llegar. El nuevo parque, que contará con una dotación permanente de cuatro bomberos, está a minutos de la Serra de Bèrnia y de la Serra d´Oltà, dos de los parajes más importantes de la comarca. También está muy próximo a las montañas y pueblos del interior.

Los bomberos también podrán llegar a toda prisa a Calp, Teulada y Moraira. Los vecinos del sur de la Marina Alta, cuando este parque funcione, respirarán aliviados.

«Esta zona es de gran riesgo de incendios forestales. De ahí que este parque fuera totalmente necesario», subrayó ayer Lloret, que aclaró que para dotarlo de bomberos no se echará mano de las plantillas de Benidorm y Dénia, sino que se crearán 20 plazas nuevas.

Mientras, el alcalde, Juan Bautista Roselló, incidió en que el edificio es un «modelo en eficiencia energética». Cuenta con placas solares, iluminación LED y sistema de recogida de aguas pluviales. Es prácticamente autosuficiente. Está junto a la N-332 y también junto al peaje de la AP-7. Se ha elegido una ubicación estratégica.