El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha inaugurado esta mañana junto al alcalde de Xàbia, José Chulvi, el nuevo ayuntamiento de este municipio, edificio que ha estado ocho años cerrado hasta que, mediante un crédito ICO de 1,8 millones, se ha podido equipar y poner a punto. El alcalde ha reconocido que estas instalaciones se concibieron «en otra época». El edificio costó 6,6 millones de euros. En el anterior mandato, se planteó que el consistorio lo alquilara para una clínica o un hotel. Sin embargo, el gobierno de Chulvi decidió, finalmente, darle el uso para el que se creó, el de nuevo ayuntamiento.

El alcalde destacó que el gobierno local ha rescatado una instalación que era «testimonio del pasado» y la ha puesto «en hora». En el nuevo ayuntamiento, se ubica también el retén de la policía local, cuerpo que cuenta con unas instalaciones modernas. Incluso dispone de una galería de tiro, a la que el alcalde y Puig han bajado esta mañana.

El presidente del Consell se ha comprometido a romper el aislamiento en infraestructuras que sufren Xàbia y la Marina Alta. «Xàbia es el corazón de nuestro país y de la Comunitat Valenciana», ha proclamado. El alcalde le ha pedido que trabaje para que la sanidad de la comarca vuelva a ser pública y para mejorar el transporte de tren (el reclamado Tren de la Costa) y por carretera. Ha destacado que Puig le ha dado «la palabra» de que el Consell cumplirá un convenio de 2005 por el que se comprometía a construir la piscina cubierta de Xàbia.

Ximo Puig es el primer presidente de la Generalitat que acude en visita oficial a Xàbia. También es el primero que firma en el libro de honor de la villa. Los populares Alberto Fabra, Francisco Camps y Eduardo Zaplana sí pisaron el municipio, pero en actos de partido o en circunstancias especiales como la riada de 2007 (Camps) o la inauguración de las obras del monasterio de los Jerónimos de Xàbia (Zaplana).