A cinco jóvenes que han decidido esta mañana acabar la noche de fiesta dándose un chapuzón y divirtiéndose en la plataforma hinchable de la playa de la Grava, en Xàbia, les va a tocar rascarse el bolsillo.

El vigilante de la plataforma (es un negocio en concesión), alarmado por el alboroto, ha avisado a la Policía.

Los jóvenes, cuatro chicos y una chica, no querían abandonar la plataforma. Se lo estaban pasando en grande lanzándose por los toboganes y dando brincos.

Los vecinos más madrugadores que paseaban por la playa se sorprendían también de la jarana que los jóvenes tenían montada en la plataforma. Al final, ha llegado una patrulla de la Guardia Civil y otra de la Policía Local.

Los agentes han obligado a los chavales a salir del agua. Un chico y una chica se han hecho los remolones. Pero no tenían escapatoria. A todos les han tomado los datos y los han denunciado. Otra chica de la pandilla, que se quedó sentada en la orilla y no quiso darse un chapuzón, se ha salvado de la multa.