Dénia, el pueblo con más fiestas del mundo (se disputa este título con su vecina Xàbia), es un Saturno que devora concejales. La edil de Compromís Eva Ronda ya no puede con tanto acto. Dimitió ayer de concejala de Fiestas. Explicó que, tras 20 meses compaginando su trabajo privado (no está liberada) con las responsabilidades de Fiestas, Empleo, Comercio, Creama, Transparencia y Modernización y Administración, está desbordada. «He tomado la decisión de no seguir como concejala de Fiestas para centrarme al 100 % en la gestión de las otras concejalías», indicó.

Además, ahora el alcalde, Vicent Grimalt, le ha delegado Políticas Activas de Ocupación, que hasta ahora llevaba el edil no adscrito Antonio Losada (ejercía de portavoz de Podemos), quien ha renunciado al acta de concejal por motivos personales.

Ronda se confesó abrumada por la apretada agenda de fiestas en Dénia. «Es la ciudad más festera del mundo», afirmó. La edil precisó que el responsable de este departamento debe acudir a «una multitud de actos públicos y oficiales que requieren una dedicación mucho más exclusiva que la que yo puedo ofrecer en estos momentos, resultado de mi situación personal y laboral».

La concejala ha descubierto también que las fiestas en Dénia es un toro difícil de lidiar. Tuvo la mala pata de estar de viaje en Cuba cuando trascendió la polémica por la negativa a que una mujer encarnara a uno de los tres Reyes Magos en la pasada cabalgata. Eva Ronda era reacia a que la capitana de la filà mora a la que le tocó por un sorteo se vistiera de una de sus Majestades de Oriente. Al estar fuera, no pudo ni justificar sus reticencias ni reconducir un embrollo que sirvió, al menos, para que el ayuntamiento permitiera que cualquier vecino, fuera hombre o mujer, saliera caracterizado como Rey Mago.

Sin embargo, la edil ayer no removió pasadas controversias. Dijo que su renuncia «es una decisión propia y personal y cuenta con el apoyo de mi grupo y de los socios de gobierno (el PSPV)». Destacó el trabajo que hace la técnica del departamento y la comisión de fiestas.

El alcalde ha delegado ahora esta concejalía al socialista Óscar Mengual.

Dénia tiene fiestas para aburrir. Las Fallas ya se sabe que tienen casi todo el año presentaciones y actos. También están los Moros y Cristianos. Hay Fogueres, aunque son una fiesta menor. La Festa Major con los famosos Bous a la mar tienen una enorme repercusión. Y luego hay un puñado de celebraciones. El alcalde y el concejal de Fiestas hacen horas por un tubo. Dénia y Xàbia están casi a la par en esa vorágine sin fin de festejos.