Ayer era el día en el que el cura de L'Alfàs del Pi, Miguel Ángel Schiller, tenía que acudir al Obispado de Orihuela-Alicante a dar explicaciones sobre las afirmaciones que colgó en su perfil de una red social contra la Iglesia y los casos de pederastia. Y así lo hizo.
El Obispado comunicaba el pasado viernes con una carta dada en mano por miembros de la curia al párroco alfasino que este miércoles debía acudir a la sede en la ciudad de Alicante para, según explicaron en un comunicado, «tomarle declaración». Su cita en la institución eclesiástica era sobre las 11.30 horas.
Schiller explicó ayer a INFORMACIÓN que «con lo que dije, lo normal era dar explicaciones». De hecho, hizo algo más que eso. «Pido disculpas por las expresiones que he usado y que no son las correctas», según indicó a este diario, un perdón que habría transmitido también en su comparecencia en el Obispado. «Si he ofendido a alguien, pido disculpas», reiteró.
Cabe recodar que el sacerdote causó gran revuelo en las redes sociales con los comentarios que publicó la pasada semana en su perfil de Facebook en el que, para comenzar, lanzó frases como «pido la baja. Me quiero ir de este negocio de corrupción que es la Iglesia» para seguir con opiniones como «sólo he conocido un obispo al menos bueno, Murgui. Todo lo demás... maricones, enfermos afectivos y desequilibrados» o «no basta con pedir perdón y avergonzarse si se mantienen las estructuras que continúan permitiendo la pederastia». Estas frases, y otras lanzadas por el mismo canal, le obligaron al día siguiente a explicarse, algo que también hizo en la homilía del pasado domingo en la iglesia alfasina: «no entiendo tanto escándalo si digo lo mismo que el Papa», acusando a los medios de sacarlas de contexto.
A la espera
Ayer volvió a reiterar que «las cosas se sacan de contexto y se malinterpretan» y que «no le veo tanta importancia» a lo ocurrido, aunque sabe que el tono no era el adecuado. Preguntado por si sabe si su comportamiento tendrá consecuencias, no quiso aventurarse y apuntó que «estoy a disposición del obispo» de la Diócesis de Orihuela-Alicante y que «lo que diga me parecerá correcto». Así que habrá que esperar a ver cuál es el siguiente paso del Obispado que, ayer, alegaba que es una «cuestión interna» y que por ahora no iba a pronunciarse.
