Compromís del Poble Nou de Benitatxell va al fin del mundo con la edil procesada por corrupción Nieves García y el concejal tránsfuga del PP Antonio Colomer. Se alió con ellos para presentar una frustrada moción de censura que tumbaba al alcalde Josep Femenia, de Red, quien gobierna en minoría, y le daba el mando del ayuntamiento al portavoz valencianista Miquel Garcia. Compromís y sus atípicos socios presentaron el voto de censura el 18 de enero. El secretario municipal les advirtió de que era ilegal, dado que lo firmaba un tránsfuga, y no lo tramitó.

Pero ahora los ediles valencianistas, la concejala imputada (irá a juicio por falsificar presuntamente endosos y pagos de obras municipales cuando era primera teniente de alcalde del PP) y el expulsado del PP han ido de la mano al juzgado de Alicante. Han presentado un recurso contencioso administrativo contra el Ayuntamiento del Poble Nou de Benitatxell y, en concreto, contra la negativa del secretario a dar validez a la moción de censura. Los valencianistas y sus socios piden al juez que proteja sus derechos fundamentales de participación en asuntos políticos. Consideran que se ha coartado su potestad a formar una nueva mayoría de gobierno.

Entre la documentación que aportan al juzgado, está la moción de censura. Los firmantes sostenían que la ley antitransfuguismo que había impedido maniobras como la de Benidoleig en 2013, donde ediles del PSPV y del PP se aliaron para intentar derribar a un alcalde del Bloc, ya no estaba en vigor. Aludían a una sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 21 de diciembre que declaraba inconstitucional que se privara a los concejales de su derecho a cambiar un gobierno.

Pero el secretario desveló que Compromís y sus socios habían obviado que el propio Constitucional aplazaba los efectos de esa sentencia hasta que se redacte un nuevo régimen jurídico «alternativo y respetuoso con la Carta Magna» que evite «las consecuencias perversas del transfuguismo».

Que los tres concejales de Compromís en Benitatxell mantengan su pacto con la concejala procesada por corrupción y el tránsfuga Antonio Colomer y traten de forzar que se vote la moción de censura los deja en una situación muy delicada en su partido. La dirección nacional les ha abierto expediente. Les conminó a no presentar el voto de censura. La propia Àgueda Micó les avisó de que acabarían expulsados. Los ediles desobedecieron. Pero, aún así, su partido valoró que, si desistían, la expulsión podría ser temporal.

El comité de garantías de Compromís aplazó esta semana adoptar medidas disciplinarias a la espera de recabar más información. Sin embargo, sus ediles en Benitatxell mantienen el pacto con el tránsfuga y con una concejala que se enfrenta a 6 años de cárcel y 15 de inhabilitación (es lo que pide el Fiscal) por cometer los presuntos delitos de falsificación documental, estafa y prevaricación.