Las protectoras de animales de la Marina Alta se indignan ante el trato que algunos cazadores dan a sus perros podencos. Rama ha denunciado ahora que un vecino de Benidoleig tiene a 9 perros confinados en una jaula repleta de excrementos. La protectora ha presentado incluso una denuncia por posible maltrato animal ante la Fiscalía. Y también ha pedido al alcalde, Pedro Antonio Seguí, que actúe.

El munícipe ha contestado ya a la protectora. Afirma que las fotografías aportadas, realizadas hace un par de semanas, «no bastan para apreciar las circunstancias que justifiquen la incoación de un expediente sancionador».

No obstante, el ayuntamiento sí ha trasladado la denuncia al propietario de los canes y le da quince días para que aporte un informe veterinario sobre el estado sanitario de todos sus perros de la raza podenco. También le exige que detalle las condiciones del recinto en el que viven los canes y la documentación identificativa y las autorizaciones administrativas respecto a los animales y las instalaciones.

Responsables de Rama han precisado a este diario que en la Marina Alta se dan otros casos de cazadores que tienen a sus perros en jaulas que no reúnen unas mínimas condiciones de salubridad. También advierten de que estos canes sólo salen de esos recintos durante los días que sus dueños los llevan a cazar.