Los pocos vecinos que este mediodía caminaban por el Carrer Major del Poble Nou de Benitatxell han dado un respingo cuando han visto venir al galope y relinchando a un caballo. El equino ha pasado como un relámpago. Ha llegado hasta el ayuntamiento y allí ha girado a la calle del mercado y justo ante la oficina de Servicios Sociales se ha parado. Por suerte, no se ha encontrado con ningún coche.

El carnicero del pueblo y un técnico municipal de urbanismo (ambos tienen mano para los animales) han amansado al caballo y han conseguido atarlo. Los vecinos han llamado a la policía local, que ha localizado al dueño. Una vecina le ha dado al animal tres cubos de agua, que se ha bebido en un periquete. Después de la carrera a plena solana, estaba sediento.

Todo ha quedado en una anécdota, pero los residentes que se han topado con el caballo desbocado todavía se frotan los ojos.