El juzgado número 3 de Dénia no ha visto indicios de prevaricación administrativa en el hecho de que el alcalde de Benissa, Abel Cardona, de Reiniciem, no abriera expediente disciplinario a un policía local que prestó un uniforme antiguo y en desuso a un amigo para el desfile de disfraces de los Moros y Cristianos. El alcalde sí apercibió verbalmente al agente. El propio ayuntamiento ha anunciado hoy que el juez ha decretado el sobreseimiento provisional de la querella. Los hechos los denunció primero el sindicato CSID y luego fue la Fiscalía la que hizo suya la denuncia.

El alcalde declaró ante el juez a finales de abril. Tras comparecer, afirmó que estaba "muy tranquilo".