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Una joven de Altea, entre las primeras españolas con carné de conducir en Arabia Saudí

Begoña Armada trabaja en la capital saudita para una multinacional española de la construcción desde hace dos años

Una joven de Altea, entre las primeras españolas con carné de conducir en Arabia Saudí

El 26 de septiembre de 2017, el rey de Arabia Saudí, Salman bin Abdelaziz, decretó que a partir de junio de 2018 las mujeres del país podrían tener el carné de conducir y llevar su propio vehículo. Esto supuso una revolucionaria reforma en un país donde está vigente una rigurosa segregación por sexos. El decreto real permitió que las residentes extranjeras en Arabia pudieran conducir también, por lo que la ingeniera alteana Begoña Armada inició el proceso de convalidar su carné de conducir español y poder conducir su vehículo en el país árabe.

Los trámites fueron largos, pero esta espera se convirtió en alegría a mediados de julio pasado cuando logró tener el título de conducir en Arabia y ser, así, una de las primeras españolas en poder conducir en el último país del mundo que ha levantado el veto a las mujeres para manejar un vehículo.

Begoña Armada vive en la capital de Arabia, Riad, desde hace dos años. Se marchó allí con sus hijas de 13 y 8 años de edad después de que a su marido lo trasladaran a este país en 2015 para trabajar en la construcción del Metro de Riad. Ingeniera Técnico de Obras Públicas desde 1996, Begoña ha desarrollado su vida laboral en Andalucía y Extremadura. Ahora, en Arabia trabaja en una multinacional española de la construcción.

Antes de venir hace poco a su pueblo natal de vacaciones publicaba en su cuenta de Facebook una foto suya con la licencia de conducir en la mano y vestida con una abaya (la larga túnica que están obligadas a llevar las mujeres cubriéndoles su ropa habitual) junto al vehículo de su empresa, y escribía que estaba «emocionadísima» por tener su «Driving License (carné de conducir)» aparte de mostrar su «orgullo» por ser «posiblemente una de las primeras españolas» en tener la licencia de conducir y, sobre todo, «por lo que para este país significa, ya que es el último del mundo que no permitía conducir a las mujeres».

La ingeniera alteana reivindicaba la independencia de las mujeres en Arabia. «Me siento feliz de formar parte de este derribo de muros. Primero como mujer ingeniero trabajando en Arabia. Y ahora, con mi carné de conducir ya en mis manos, es como contribuir orgullosa a que pasito a pasito las mujeres de este país sean más independientes».

Vida de una occidental en Arabia

En Altea, Begoña explicó a INFORMACIÓN que para obtener la convalidación de su licencia española por la árabe tuvo, su marido tuvo que realizar todos los trámites burocráticos, pues a ella, como mujer, no se le está permitido, y hacer «unas pruebas prácticas que no se les obliga a los hombres: has de conducir haciendo una curva de 90 grados hasta un punto donde no puedes seguir y luego maniobrar para dar media vuelta. Después aparcas y ya está. Ahora siento más libertad, pues antes de tener el permiso de circulación un conductor contratado por mi empresa venía a buscarme a casa y me llevaba a la oficina».

La ingeniera alteana explicó que la primera vez que llegó a Arabia para ver a su marido, tuvo un choque emocional brutal. «Todo era nuevo. Las costumbres son diferentes a las nuestras, aunque rápidamente te adaptas. No hay más remedio. Desde que bajas del avión has de llevar la abaya. Sabes que tienes que llevar la cabeza cubierta y que muchas cosas no puedes hacerlas sola en un país muy restrictivo con las mujeres que aún sufren una gran discriminación como no poder abrir una cuenta bancaria, casarse, practicar deporte, alquilar un apartamento, o viajar sin el permiso de un tutor varón, ya sea padre, marido, hermano o, incluso, hijo».

Españoles en Arabia

La comunidad española en Arabia es bastante amplia, según explica Begoña. Explica que las familias occidentales «vivimos en una urbanización cerrada y muy segura. Allí se buscan actividades para no aburrirse. Las mujeres que no trabajan aprovechan para seguir estudiando o dan clases de pintura o música por las mañanas. Y por las tardes hacen actividades para los niños como natación, gimnasia, o clases de español, inglés o francés».

Según Begoña, desde que en junio de 2017 se nombró como príncipe heredero al hijo del rey Salman, Mohamed bin Salman, de 31 años, este ha puesto en marcha el proyecto «Visión 2030» con una «apertura social y de libertad hacia las mujeres. Tener carné de conducir es un paso importante, y yo me siento feliz de ser una de las primeras occidentales que lo han conseguido».

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