Las calas de Xàbia se liberan de coches. Tras un verano en el que la calle que baja a la playa de la Barraca o del Portitxol está hasta arriba de automóviles, aparcados incluso en los laterales donde la raya amarilla deja muy claro que está prohibido estacionar, el ayuntamiento ya ha decidido que hay que tomar medidas drásticas y seguir el modelo de la Granadella, la cala que hace dos veranos se cerró a los coches.
El alcalde y concejal de Turismo, José Chulvi, confirmó ayer a Levante-EMV que el próximo verano la Barraca también se cerrará al tráfico en momentos de gran afluencia. Recalcó que la prioridad es garantizar la seguridad de los bañistas. Ya ha ocurrido estos días que las ambulancias tengan problemas para acceder cuando hay que evacuar a algún accidentado o enfermo. Avanzó también que se instalarán elementos que impidan aparcar en puntos concretos donde los coches estacionados obstaculizan el paso de los vehículos de emergencia.
El alcalde subrayó que en la Granadella la decisión de bajar la barrera y prohibir que bajen vehículos (sí lo pueden hacer los residentes) está funcionando bien. Los bañistas tienen este verano dos medios de transporte, un autobús y un trenecito turístico. Ambos son gratis. Están encantados de olvidarse del engorro de aparcar en una cala que, libre de coches, es todo tranquilidad.
Pero el caos se ha trasladado a la Barraca. Los residentes han tenido que colocar en sus cancelas carteles para indicar que está prohibido aparcar. Más de uno no ha podido salir de casa con el coche al tener un vehículo en su puerta. La policía local se harta de poner multas. Hay días que sanciona a más de cien conductores. Pero ni así evita que los bañistas aparquen en el primer hueco que encuentren, aunque sea sobre la acera, en la rotonda que se ha creado este año para dar fluidez al tráfico o en las estrechas callejuelas Samaruc y Fartet.
Lo que todavía debe decidir el ayuntamiento es si, al igual que en la Granadella, se pone en marcha un autobús para llegar a la Barraca o a los bañistas que se encuentren la barrera bajada les tocará ir a pie.
