El inexpugnable castillo de Dénia no lo es para la fauna en expansión. Las gaviotas patiamarillas abunda. Y otra especie que va a más es la de las ardillas. Habitan en los pinos de la fortaleza y saltan y trepan de los árboles a las torres y murallas. En la imagen, se ve a uno de estos roedores "volando" desde la Torre Roja, del siglo XV, a los pinos.

Las ardillas van camino de convertirse en plaga en la Marina Alta. Han llegado a los parques urbanos. En la Plana del Montgó, en Xàbia, también proliferan.