El arroz caldoso es uno de los grandes placeres de la gastronomía de la Marina Alta. Pero la cocina también tiene memoria. Y remite a tiempos de gozo y también de calamidades y hambre. Jesús Pobre rescata ahora una de las recetas de supervivencia de la posguerra. Las jornadas "Què fem del caldo", que ahora llegan a su tercera edición y que se celebran en el CdT de Dénia y en el gran riurau de Jesús Pobre, recuperan el "arròs amb guixes". La guija o almorta es una legumbre que, en la cocina, se ha utilizado en épocas de penuria. Con la harina de guijas se elaboran las humildes gachas.

"Es una planta de supervivencia que aguanta bien las sequias", ha explicado hoy el alcalde de Jesús Pobre, Javier Scotto, que ha avanzado que en Jesús Pobre este año se ha plantado esta legumbre y se ha recogido la cosecha que se utilizará para cocinar en el riurau el próximo día 27 el "arròs amb guixes". Scotto ha recordado que Dénia está celebrando ahora el ciclo "Fem memoria. Dénia, guerra y repressió" y ha abogado por descubrir la cocina de supervivencia de la posguerra.

El día 22 tendrá lugar en el CdT un "mano a mano" entre dos cocineras de toda la vida y el chef Miquel Ruiz. Las dos mujeres elaborarán la receta ortodoxa, mientras que Miquel Ruiz la reinterpretará. Se proyectará un video de la recuperación del cultivo de la guija en Jesús Pobre, donde también se ha cosechado el trigo antiguo con el que se harán las cocas de aceite que también se degustarán en estas jornadas.

Y el día 27 llega el momento de saborear un arroz muy nutritivo y de una exquisitez sencilla y sin pretensiones. Un arroz que trae a la memoria los duros tiempos de la posguerra. Se cocinará en el riurau de Jesús Pobre, un templo de la ruralidad y la tradición. La variedad de arroz será, claro está, el bomba del Marjal de Pego. El alcalde pegolino, Enrique Moll, recalcó ayer que Pego es el único productor de arroz en la provincia de Alicante. Los postres son cosa de la pasteleria Victoria de Ondara, una de las mejores de la Comunitat Valenciana.

El munícipe de Ondara, José Ramiro, y el de Dénia, Vicent Grimalt, han insistido en la vocación comarcal de estas jornadas y en la importancia de que Dénia, como ciudad creativa de la gastronomía de la Unesco, apueste por la despensa y la tradición culinaria de la Marina Alta.