El susto ha sido de aúpa. El incendio iniciado en un aparato de aire acondicionado y que ha prendido en el aislante de una finca de la calle Sandunga (el lateral del edificio era una pira) y que luego, a través de las pavesas, ha prendido también en otra finca de la calle Calderón, ha obligado a desalojar a decenas de vecinos. Han intervenido en la extinción todos los efectivos disponibles de los parques de Dénia y Benissa (16 bomberos), así como tres profesionales que estaban fuera de servicio, entre ellos el jefe del área de la Marina Alta, Javier Fayos. También han participado varias patrullas de la Policía Local y de la Policía Nacional.

Una mujer embarazada ha sido trasladada en ambulancia al hospital por precaución. Mientras, la Cruz Roja ha montado a toda prisa una carpa para atender a los desalojados. No ha habido heridos. Pero los 12 profesionales y voluntarios de la ONG, entre ellos dos psicólogas, han atendido a una madre y a su hija y a otra vecina, las tres de la finca de la calle Calderón, por una crisis de ansiedad. También han proporcionado mantas y han hidratado a una anciana de 89 años con problemas de movilidad (va en silla de ruedas) evacuada de la finca de Sandunga.

La anciana ha reaccionado con gran entereza. "Esta gente se asusta por nada", ha manifestado a este diario. "En mis 89 años ha vivido muchas cosas como para que ahora me acobarde por un incendio", ha dicho.

Los vecinos ya han regresado a sus casas. Una vivienda de la novena planta de Sandunga y un trastero de esta finca, así como otro trastero de la terraza del edificio de la calle Calderón, han sufrido graves daños.