Calp no quiere que se le escape ni un grano de arena. En verano, retira la Posidonia oceanica que arrastra el oleaje a las playas (en invierno se deja dado que actúa de barrera contra la erosión). Pero luego criba la posidonia y recupera la arena que las máquinas se llevan junto a esta planta marina. Y así ha recuperado nada menos que 1.083 metros cúbicos de fina arena. El departamento de Medio Ambiente devolverá el sedimento de más calidad a las playas. Y utilizará la arena que tiene una granulometría pelín más gruesa para restaurar las zonas más degradadas del humedal de Les Salines.

posidonia únicamente se retira en verano. A los turistas les molesta esta maravillosa planta, que es un bioindicador de la calidad de las aguas. «Apostamos por una gestión sostenible de las playas de Calp. Reutilizamos la arena para regenerar nuestro litoral en lugar de hacerlo con tierra de cantera», destacó ayer el edil de Playas, Jan Van Parijs.