Una biblioteca con historia (está en la antigua Casa Sahuquillo, una mansión señorial del comercio de la pasa) y con historias (las de los 80.000 libros que guarda). Dénia ha inaugurado hoy su nueva biblioteca. "Hemos recuperado un edificio que estaba abandonado y que ahora es una biblioteca del siglo XXI, la que Dénia se merece", ha destacado el alcalde, Vicent Grimalt.

Cientos de vecinos han recorrido las salas de estudio, lectura e investigación, el espacio infantil, el patio acristalado. El día de puertas abiertas ha confirmado que existía gran expectación por descubrir que escondía este edificio, abandonado y lúgubre durante años y restaurado en los últimos meses de arriba a abajo.

Los visitantes se han quedado maravillados con la azotea, desde la que se descubre una Dénia de tejados y azoteas nunca vista. La biblioteca está coronada por una torre pintada ahora de azul que ejemplifica muy bien lo que representa este restaurado edificio. Es una atalaya de cultura y libros.

La directora de la biblioteca, Llúcia Signes, ha recordado que aquí se guardan nada menos que 80.000 libros. Ha precisado que antes, en la Casa de Cultura (allí ha estado hasta ahora la biblioteca), no se veía tan ingente cantidad de volúmenes. No había espacio para hacer visible ese gran patrimonio escrito. Ahora los modernos anaqueles están preñados de libros que piden a gritos ser leídos.

El concejal de Cultura, Rafa Carrió, de Compromís, ha lanzado un nuevo reto. "Dénia debería tener tres o cuatro bibliotecas más".

El alcalde ha recordado que este proyecto comenzó cuando Paqui Viciano (PSPV) era alcaldesa y Pau Reig (de Compromís y hoy presente en el acto), concejal de Cultura. "Consiguieron que en 2008 el Gobierno incluyera esta subvención y la de la rehabilitación de la Casa de Torrecremada. Luego desaparecieron incomprensiblemente. Un gobierno progresista inició el proyecto y otro también progresista lo ha culminado. Y vamos a seguir luchando por recuperar la subvención de Torrecremada", que es otra casona histórica del siglo XIX.

La nueva biblioteca mantiene elementos patrimoniales muy destacados. La escalera es la original. Su barandilla y pasamanos de madera son magníficos. Mientras, el pavimiento hidráulico del siglo XIX se ha reutilizado para decorar los alféizares, dinteles y jambas. Y la torre sobresale. Su color azul es todo un hallazgo. El primer dueño de la casa se subía aquí para divisar los barcos que llevaban la pasa de la Marina Alta a Gran Brentaña y América.