El Auditorio de Teulada-Moraira ha estado presente en la feria Alicante Gastronómica II Encuentro de Estilo de Vida Mediterránea donde a través de su marca turístico/cultural Alere/Dolia ha mostrado el ADN de la uva moscatel de Alejandría en una acción protagonizada por el maestro heladero de Xixona y bartender, Santi Gómez.

Un proyecto el de Alicante Gastronómica en el que el auditorio se suma por las propiedades organolépticas que tiene la uva moscatel de Alejandría y los valores nutricionales y saludables que nos aporta.

El escenario elegido fue el expositor de Turismo de la Comunitat Valenciana. L´Exquisit Mediterrani, donde la directora del auditorio, Maite Serrat, habló de Alere/Dolia, una apuesta por la cultura gastronómica que viene celebrándose en este espacio cultural desde el año 2011 durante el primer fin de semana de septiembre y que sirve como plataforma de divulgación para poner en valor la preservación del territorio y el paisaje a través de nuestro producto autóctono más preciado, como es la uva moscatel de Alejandría, y aquellos productos que nos ofrece nuestra gran despensa del Mediterráneo.

Siguiendo en su línea de trabajo, desde el auditorio se ha estado trabajando desde hace más de un año conjuntamente con el maestro heladero para descifrar el código del moscatel de Teulada-Moraira y, en el corazón de la gastronomía, Santi Gómez, presentó a través de una demostración culinaria los aromas que nos aporta el moscatel en un plato, porque lo que mejor interpreta un territorio es un plato.

Una creación muy dulce que Gómez ha creado sobre un soporte muy especial diseñado para la ocasión por el artista alicantino, el maker de los chefs y bartenders, José Miguel Piñero del Taller de Piñero, donde ha plasmado la máxima expresión del territorio del moscatel, siendo el hilo conductor la base vínica. José Miguel, presente también en la acción, explicó que "desde el principio el proyecto le pareció muy interesante y como el origen de donde nace todo es la cepa y la tierra se inspiró en crear un soporte neutro, minimalista, con una cepa en el medio para que destacase la creación en ella". Y el resultado final creo que ha sido perfecto, apostilló.

"La uva moscatel de Alejandría es una uva emblema del Mediterráneo, en España está presente en muchas regiones pero la que vive en la Marina Alta, en concreto, en Teulada Moraira, tiene un carácter especial y da unos matices distintos como se ha desprendido de la primera fase del proyecto descifrando el código del moscatel a través del helado», ha apuntado Gómez, quien ha destacado que ahora mostramos los avances realizados en la segunda etapa de este proyecto y ya estamos inmersos en la tercera fase para expandirlo al terruá de la Marina Alta.

Una creación con mucha historia donde han estado presentes todos los agentes particulares que definen nuestro terruá (pluviometría, temperatura, tierra y el viento del Llebeig) y los aromas que vienen definidos por los agentes climáticos específicos del terrúa del municipio, que los presentes pudieron olfatear cuáles son esos matices.

Un bocado con sabor a tierra, a jazmín, que le viene dado por el agente de la temperatura, a mandarina, que no das el viento tan particular de Teulada-Moraira, el Llebeig, y el aroma tradicional de la uva pasa que nos proporciona el agente de la pluviometría. Una bella creación acompañada de la brisa marina impregnada por ese olor a jazmín que ha llegado a los presentes.

Un auténtico relato sobre la expresión del territorio en todos los sentidos, una armonía de sabores y registros identificativos del municipio que han quedado latentes en esta experiencia, que ha concluido con una degustación de helado de azahar acompañado del extraordinario moscatel de Teulada Moraira a todos los asistentes para que pudieron conocer el sabor y el aroma del territorio.