La gastronomía de Xàbia está que se sale. El Bon Amb de Alberto Ferruz, con dos estrellas Michelin y tres soles Repsol, y el Rodat de Nazario Cano, con una estrella y un sol, lideran la irrupción del municipio en la alta cocina. Pero hay otros muchos restaurantes que llevan toda la vida defendiendo la cocina xabiera. La Asociación de Restauradores de Xàbia (ARX) les rinde homenaje en su gala anual desde hace 14 años. Y el martes se celebró en el Parador una nueva gala. Esta vez los premiados fueron Claudio Sánchez Sosa (restaurante Calima) por toda una vida dedicada a la hostelería, Javier Vives Cruañes (restaurante La Fontana) por su profesionalidad en sala y José Crespo Bisquert (restaurante Trencall) por su trayectoria a los fogones. La ARX también entregó un reconocimiento a Ripoll Femenía como empresa colaboradora 2019.
La gala contó con la presencia del alcalde, José Chulvi, quien trasmitió al sector su enhorabuena por todos los logros conseguidos y les animó a seguir trabajando unidos por esa oferta de calidad que se está convirtiendo en la seña de la cocina xabiera, desde la pura vanguardia a la más tradicional.
El presidente de la asociación, José Manuel Piña, y sus compañeros en la junta directiva -Mariana Castelló y Guillermo Bolufer- felicitaron a todos los profesionales por el buen momento que vive la cocina de Xàbia.
