La Guardia Civil de Calp ha detenido a dos personas, tras ser sorprendidas "in fraganti", cuando se disponían a cometer un delito de hurto a un vecino de avanzada edad en una concurrida avenida del municipio. Los supuestos ladrones trataban de emplear el método conocido como del "abrazo". Este método se caracteriza por ejecutarse al descuido de sus víctimas, aunque los autores no dudan en emplear la violencia.

Los agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de Calp, mientras se encontraban en la avenida Gibraltar de dicho municipio, observaron cómo una mujer hablaba con un señor de avanzada edad, realizando muchos aspavientos y abrazándole repetidamente de manera efusiva, incluso, exagerada. Entre tanto hablaban, la joven le cogía repetidas veces la muñeca izquierda, haciendo movimientos bruscos y muy repetitivos.

Del mismo modo, los agentes se percataron de un vehículo estacionado en las inmediaciones, con el motor en marcha, cuyo ocupante estaba en actitud vigilante, al parecer, esperando a la mujer, situación que les hizo sospechar que pudiera tratarse de un posible hurto mediante el método conocido como del "abrazo".

En este método, los autores dividen sus roles: una persona se queda esperando en el vehículo para huir rápidamente del lugar mientras que otra, normalmente una mujer (para dar mayor confianza), aborda a la víctima, elegida de forma previa, habitualmente una persona de avanzada edad, a poder ser, extranjera. Entabla conversación con la víctima, preguntándole por alguna dirección o diciéndole que es amiga de algún familiar suyo. La víctima, sin darse cuenta, le va facilitando los datos de los que se va nutriendo la mujer. De esta forma, en lo que dura la conversación, la autora le prodiga exageradas y repetitivas muestras de cariño, cogiéndole de la mano, si observa que lleva reloj, pulseras o anillos o abrazándole, si lo que quiere hacerse es con collares o cadenas.

Ante esta posibilidad, los agentes decidieron intervenir en ese mismo momento, interceptando a la mujer e identificando a la supuesta víctima, quién resultó ser un ciudadano británico de 72 años, comprobando que, efectivamente, el señor portaba un reloj de oro, de una prestigiosa marca, valorado en 9.000 euros. De manera simultánea, otro de los agentes procedió a identificar al conductor del vehículo que estaba a la espera, dándose la circunstancia que era el marido de la mujer identificada.

Tras realizar las correspondientes gestiones de identificación, se comprobó que ésta tenía en vigor una orden de detención por haber cometido en Dénia un robo con violencia e intimidación, en el que intentó sustraer un reloj a un señor de 71 años, a quien le causó diversas lesiones como consecuencia de ello. También le fue imputado, días antes, un delito de hurto, cometido en Moraira, igualmente sobre un anciano, a quien le sustrajo una cadena de oro con un crucifijo, valorado en 1.500 euros, hecho por el que fue detenida.

Por todo ello, se procedió a la detención del matrimonio, ambos de 32 años y de nacionalidad rumana, quienes ya contaban en su haber con numerosos antecedentes por hurtos y robos, relacionados todos ellos con el método del abrazo y cometidos en diferentes provincias del territorio nacional.

Tras ser puestos a disposición de la autoridad judicial, quedaron en libertad con cargos, a la espera de juicio.