Una falla humilde, pero con encanto e historia. El Primer Grup de Mariners de Dénia, un prodigio de urbanismo tan sencillo como hermoso, cumple 70 años. Fue en 1949 cuando se puso en pie esta plazoleta rodeada de las casitas de los pescadores. En 2007, se reurbanizó. No ha perdido ni un ápice de su encanto y su esencia marinera.

Ahora los vecinos han realizado una falla artesanal de homenaje a esta plaza tan especial. Uno de los ninots es el de un pescador que remienda las redes. El monumento está coronado por una casita que reproduce la tipología de las del lugar, con un arco de medio punto en el zaguán. Está tan bien hecha que detrás los vecinos han colocado retales que recrean la ropa tendida al sol. Esta arquitectura sin pretensiones irradia la belleza de la sencillez. Eso sí, el bloque que cierra la plaza cuenta con una portada de granito a la que se le adivina el porte noble.

La fallita también tiene un punto crítico. Los vecinos cuestionan que un tramo del antiguo puerto pesquero esté ahora "privatizado" por los megayates. "El mar es de todos", reza uno de los letreros de la falla.

Los vecinos del Primer Grup de Mariners siempre decoran su plaza para las Fallas. Han logrado, de hecho, el premio al mejor "carrer engalanat". Esta plaza es uno de los rincones más bellos y desconocidos de Dénia.