? Bajar en coche por la calle Richard Wagner es un ejercicio tan épico como escuchar «El anillo de los Nibelungos» (ópera de Wagner). El firme está hecho trizas. Ahora el ayuntamiento ha colocado una barrera para impedir que entren vehículos que no sean los de los residentes. Aquí hay numerosos chalés de lujo. La calle, cuando aparcaban los bañistas, se colapsaba y llegó a ocurrir que no pudieran entrar ambulancias.