Álex Waylett, un joven de 18 años que estudia grado medio de gestión administrativa y es embajador de la Escuela de Jóvenes Emprendedores (EJE), ha hecho historia. Hoy se convertirá en el primer concejal transexual de la Marina Alta. Iba de número tres en la candidatura de Gent per al Canvi, grupo que logró la mayoría absoluta con 4 ediles. Álex se declara «muy orgulloso de dar visibilidad a su colectivo». Pero en seguida apunta que estas elecciones han dejado otro «hito» en Sagra. Por primera vez, una mujer será alcaldesa. Maite Roselló romperá ese techo de cristal.

La política no entraba en los planes de Álex. «Vinieron a buscarme y consideré que era una buena oportunidad para conocer desde dentro la política municipal». Afirma que van a atenerse al nombre de su partido y a impulsar «un cambio para bien en Sagra».

Álex destaca la tolerancia de sus vecinos. Relata una «anécdota». «En 2017, fue festero. Hacía un año y medio que había dado a conocer mi cambio. Cuando subí al escenario, toda la gente se levantó a aplaudirme. Me dijeron que estaban orgullosos de que hubiera dado el paso de ser yo mismo. Ni a mi familia ni a mí nos han hecho una mala cara».

Hace dos años y medio que este joven inició el proceso de reasignación de sexo. Ha acudido incluso a institutos a contar su experiencia. Álex normaliza la diversidad.

En la Marina Alta, los avances sociales más estimulantes llegan en los pueblos pequeños. Siempre.