Los cultivos indoor de marihuana cada vez aparecen en lugares más insospechados. Ahora la Guardia Civil ha descubierto dos invernaderos de esta droga debajo de la piscina de un chalé de Calp. La operación se ha saldado con el arresto de un ciudadano holandés de 38 años al que las autoridades de su país consideran un sujeto peligroso.
Según la Guardia Civil, al arrestado, al que también se imputa un supuesto delito de defraudación de fluido eléctrico y que podría haber obtenido un beneficio de unos 30.000 euros, se le relaciona con un presunto homicidio, con un secuestro con rehenes, con robo con violencia y también con el tráfico de droga en los Países Bajos.
Los agentes, en el transcurso de esta operación denominada « Zagem», hallaron debajo de la piscina del chalé donde residía el ciudadano holandés ahora detenido dos invernaderos para la producción intensiva de plantas de marihuana.
El sospechoso había instalado un sistema que se abastecía ilegalmente de la red eléctrica para falsear las condiciones climáticas y ambientales de desarrollo de las plantas por medio de lámparas de luz, filtros de aire, aparatos de aire acondicionado, un sistema de riego y de control de temperaturas. De esta forma, la marihuana crecía a toda prisa.
La Guardia Civil calcula que con este método el individuo, que ha quedado en libertad con cargos, podría haber producido hasta ocho cosechas de marihuana y haber obtenido 30.000 euros de beneficio.
