Las boyas ecológicas de amarre han desaparecido este verano de la playa del Portet de Moraira. El pasado verano se colocaron seis. Pocas para las embarcaciones que buscan el abrigo del Cap d'Or. Pero el ayuntamiento lanzó un mensaje de sostenibilidad al pujante turismo náutico. Aquí hay una frondosa pradera de posidonia oceánica. Es obligatorio preservarla y evitar que las anclas la deterioren.

Las boyas se instalaron el pasado verano con un permiso provisional. El actual gobierno local (Compromís, PSPV y Cs) ha precisado que a finales de 2017 (entonces todavía gobernaba el PP) se trasladó a Costas una documentación incompleta. El actual gobierno ya ha pedido a la empresa concesionaria de las boyas que aporte al departamento ministerial todos los documentos. El ayuntamiento espera que el permiso de Costas llegue en los próximos días. Tendrá una vigencia de 4 años. Lo de las boyas no representa un capricho. La posidonia es un hábitat protegido.