El turismo está cambiando. El sol y playa no falla, pero los visitantes piden nuevas actividades. Les atrae la cultura. Y si está salpimentada con talleres para niños, cena popular y vinos excelentes y del terreno, la cosa ya pinta muy bien. Unas 200 personas participaron el jueves en una ruta didáctica en el yacimiento de la Cova de les Bruixes del Poble Nou de Benitatxell. En el camino, se toparon con el Molí de l'Abiar. Luego, ya en el yacimiento, las familias descubrieron las peripecias de los bandoleros ( els roders). Los niños se lo pasaron en grande con los talleres. Y luego llego el momento de la cena de sobaquillo, maridada con los estupendos vinos blanco y tinto «Cova de les Bruixes», de Pepita García y Miquel Almenara.