El tornado que en la madrugada de ayer tocó tierra en la playa del Raset de Dénia dejó un reguero de destrucción. Fue tan potente que devastó lo que halló a su paso y arrasó el pabellón deportivo municipal y causó también graves destrozos en el Centro de Desarrollo Turístico (CdT). Las cámaras de seguridad del restaurante Fernando, que ha sufrido daños valorados en unos 400.000 euros, captaron el torbellino. Lo más llamativo es que desarrolló tanta energía que se ve un estallido de luz, un deslumbrante fogonazo. Es en ese momento cuando esta manga marina que avanzó tierra adentro provocó más destrucción. En el vídeo se observa perfectamente el movimiento circular del aire.

Nando, el propietario del restaurante, que ya está manos a la obra con numerosos operarios en la reparación de los daños (de hecho, abrirá ya mañana), ha explicado que las maderas que el tornado arrancó de uno de los chiringuitos de la playa salieron disparadas "como un torpedo" contra su negocio.