El Ayuntamiento de Calp realizará excepciones a la ordenanza sobre condiciones acústicas que prohíbe todo tipo de obras de urbanización y construcción de uso residencial en el mes de agosto. El consistorio trata así de paliar los efectos que el estado de alarma y la paralización de las obras están teniendo en el sector de la construcción de la localidad.

Actualmente la ordenanza prohíbe todo tipo de obras de urbanización, construcción o edificación en suelos urbanos de uso residencial entre el 1 y el 31 de agosto.

Con estas medidas se pretendía garantizar el descanso de los turistas y residentes. Sin embargo, ahora el equipo de gobierno estudia modificar estos términos con el fin de flexibilizar horarios y fechas. Busca, de este modo, compensar al sector por la paralización de su actividad. Esa moratoria en la ordenanza de ruidos será sólo aplicable en el verano de 2020.

El concejal de Comercio, Paco Avargues, ha señalado que "estamos estudiando fórmulas en función de la duración del estado de alarma. Vamos a flexibilizar fechas y horarios para que los constructores puedan compensar el tiempo que han tenido que parar".