La videoconsola debería tener atornillados al sofá a los amantes de los videojuegos. Pero se echan a la calle. La Policía Local de Dénia sorprendió ayer a dos vecinos que caminaban juntas por la calle Benitatxell. Eran familiares. Uno acompañaba al otro a vender una videoconsola.

Los agentes también sancionaron a un vecino que decía que venía de trabajar. Sin embargo, su jornada laboral, como acreditaba la documentación que mostró, había terminado tres horas antes.

Las 30 denuncias de ayer que pusieron la Policía Local y la Nacional por incumplir el estado de alarma fueron por motivos que se repiten día sí y día también. Un vecino salió a la calle a charlar con un amigo. Dos obreros estaban trabajando en un piso privado y utilizaban zonas comuntes. Otro vecino venía de comprar en el supermercado. Llevaba sólo dos productos, y se dirigía a un tercer establecimiento a comprar un producto más. Otra persona que venía de comprar mostró un tique de una hora antes.

Un vecino también acabó denunciado por caminar tres kilómetros hasta casa de sus padres para recoger una cafetera. Dos personas caminaban juntas paseando a sus perros.