En las playas hay que estar preparados para todo. El coronavirus ha obligado a revisar todos los protocolos. Esta tarde los socorristas de la Cruz Roja de Xàbia han realizado en la playa del Arenal una práctica de reanimación cardiovascular a una paciente en parada cardiorespiratoria y con posible covid-19. El simulacro ha servido para afinar como un reloj el protocolo de seguridad. A la paciente, primero que nada, se le coloca una mascarilla. Mientras, los socorristas la asisten enfundados en buzos y protegidos de la cabeza a los pies. También se ha montado en un periquete una carpa, que es otra medida de protección y de distancia social. En este verano en el que la pandemia, aunque mitigada, sigue ahí, es imprescindible aplicar estrictos protocolos de prevención del coronavirus. Al objetivo esencial de salvar vidas en las playas se une el de evitar contagios.