Cientos de chalés de las urbanizaciones del sur de Xàbia (Balcón al Mar, Costa Nova o el Tossalet) han amanecido hoy sin suministro de agua. En algunos casos, las viviendas ya llevan hasta diez horas sin que salga una gota de los grifos. En la tarde de ayer, ya empezó a fallar la presión. Apenas salía un hilo de agua. Los vecinos se apañan como pueden. La mayoría tienen cisternas y aljibes. El agua que tienen almacenada la utilizan para limpiar los inodoros. También sacan cubos de las piscinas.

Estos cortes son consecuencia de la rotura la noche del lunes de la tubería que envía el agua de la planta desalinizadora a la red de suministro de Xàbia. Es, como indicó el gerente de Amjasa, la empresa municipal de agua, Josep Lluís Henarejos, la avería "más crítica". La desalinizadora soporta el 60 % del abastecimiento. De golpe, la planta quedó inutilizada. Xàbia, en plena campaña turística, se ha quedado sin su gran manantial de agua.

La empersa, en un comunicado de anoche, indicaba que la avería ya se había reparado. La tubería, sin embargo, no podía entrar en funcionamiento hasta esta mañana. Toda la demanda se ha sostenido en estas últimas horas con los pozos que Amjasa tiene en Pedreguer. "La demanda está siendo superior a la capacidad de extracción y, por ello, algunas zonas están sufriendo cortes de suministro", advirtió la empresa.

Cuando la tubería reparada ya envíe agua de la desalinizadora a la red, deberán llenarse los depósitos de las zonas que se han quedado sin abastecimiento. Recuperar el agua no será instantáneo.