No hay noche en la que a la Policía Local de Xàbia y a la Guardia Civil no les llamen vecinos desvelados por el alboroto de una cercana fiesta privada. En las últimas dos semanas, la policía ha tenido que acudir a 30 juergas que no dejaban pegar ojo al vecindario. Y todavía no ha comenzado agosto, que es el mes que se organizan en los chalés más quilombos. En este verano del coronavirus, en el que lo mejor es quedarse en casa, hay quien se lo toma tan al pie de la letra que, al final, convierte su vivienda en una discoteca.

Las fiestas privadas que se repiten cada noche no son ni de lejos tan multitudinarias como la de la madrugada del sábado al domingo. La Guardia Civil y la Policía Local acudieron alertados de la escandalera por los vecinos. Encontraron a 134 jóvenes de juerga en un chalé. Eran estudiantes de Madrid que acababan de hacer la Selectividad y, al no poder irse de Interrail por Europa, se montaron la parranda en Xàbia. Los agentes disolvieron tamaña aglomeración. La denuncia puede salirle a los organizadores (fueron siete chicas las que alquilaron la casa) por 30.000 euros.

La mayoría de los avisos son por música alta y voces y risas de madrugada. Cuando llega la policía, los participantes en la fiesta suelen poner sordina a las conversaciones, bajar la música o marcharse cada uno a su casa. Es más o menos lo de todos los veranos, pero acentuado éste por el nuevo ocio nocturno que se está imponiendo en la era de la pandemia. Se organizan más fiestas en los chalés. Y se sale menos. En las discotecas no se puede ahora bailar y de ahí que los más bailongos prefieran convocar sesiones «dance» domésticas.

Las fiestas caseras están tomando tanta fuerza en Xàbia que el ayuntamiento ya ayer lanzó un comunicado para poner orden en tanto jolgorio. Instó a quienes quieran armar la parranda de puertas para adentro (jardín y piscina incluidos, claro) que registren antes una declaración responsable de actividad de ocio. Otros veranos, cuando se organizaba un cumpleaños o una fiesta, sí se hacía este trámite. Sirve para que el consistorio conozca el tipo de celebración que se va a montar, los datos de los responsables y las horas previstas.

El riesgo de los incendios

El ayuntamiento también insta a no realizar barbacoas ni lanzar cohetes en chalés próximos a masas forestales. Reclama que se eviten aglomeraciones y recuerda que los propietarios de los apartamentos y chalés de alquiler turístico deben hacer todo lo posible para evitar que sus inquilinos causen molestias a los vecinos.

Mientras, en las últimas dos semanas, la Policía Local ha puesto 130 multas a vecinos que no llevaban en la calle la mascarilla.