La Guardia Civil y la Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica de la Comunidad Valenciana investigan si un pirómano está detrás de los hasta ocho incendios que se han declarado en apenas tres días en distintos puntos de la comarca alicantina de la Marina Alta.
Según han señalado a Europa Press fuentes cercanas a la investigación, la Guardia Civil y este departamento de la administración valenciana mantienen abiertas varias investigaciones que apuntan a que algunos de los fuegos podrían haber sido provocados.
La tarde del sábado se declaró uno en el paraje de la Rana de Gata de Gorgos, en el que las llamas arrasaron uno de sus símbolos naturales: un eucalipto de 30 metros de altura y plantado en 1915. Al día siguiente, el domingo, se originó otro incendio en este mismo paraje y se ha descartado que se deba a un reavivamiento de las llamas.
Entre tanto se había desatado otro fuego en el municipio de Orba (ya extinguido) y también se localizaron distintos incendios en una pinada de la Falzia de Xàbia y en Xaló. A última hora del domingo un nuevo incendio se registró en la Vall de Laguar, en el paraje del Collao de Benimaurell, que ha calcinado una hectárea y media de bosque y otro en Les Valls del Montgó, en Xàbia, que ha arrasado una pinada, la mayoría extinguidos.
La pasada noche se ha dado por extinguido este martes por la tarde el último incendio forestal del término municipal de Xàbia sin que haya sido necesario desalojar a ningún vecino de las viviendas colindantes. En esta misma tarde se ha declarado otro, ya controlado, en Gata de Gorgos.
El oficial jefe del departamento de operaciones del Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante, Pepe Cerda, ha explicado a Europa Press que aunque el número de hectáreas calcinadas es similar al contabilizado en veranos anteriores, "preocupa especialmente la simultaneidad con la que se producen los focos".
Según ha detallado, en algunos de los incendios "sí que se desprende la intencionalidad de las actuaciones dado el corto periodo de tiempo en el que se han producido y la cercanía entre los focos".
No obstante, desde el Consorcio Provincial de Bomberos han recordado que aunque buena parte de los incendios que se producen no son intencionados, sí se deben a negligencias humanas, como por ejemplo, a quemas de rastrojos sin control. En todo caso, han recordado que está prohibido hacer quemas de restos de podas y agrícolas hasta octubre y necesario pedir autorización.
El incendio más grave registrado este verano en la Marina Alta tuvo lugar hace diez días en la Vall de la Gallinera y arrasó 158 hectáreas de gran valor natural. Ese mismo fin de semana también se detectaron fuegos en Castell de Castells, Els Poblets, Verger y la Vall de Laguar. En paralelo también se declaró otro fuego en un radio de unos 30 kilómetros, en la Marina Baja, en Castells de Guadalest.
