La investigación de los incendios forestales que se han declarado en esta segunda quincena de agosto en la Marina Alta (el más grave, el de la Vall de la Gallinera, arrasó 158 hectáreas) sigue adelante. Se tiene la seria sospecha de que al menos seis de los nueve incendios que se han producido desde el pasado sábado (los tres del paraje de la Rana de Gata y los de Els Benimadrocs, la Falzia y la Granadella de Xàbia) son intencionados. La Guardia Civil está realizando una concienzuda investigación y, según ha podido saber este diario, a los agentes del cuartel de Xàbia y del Seprona se han sumado los de la Unidad Central Operativa Medioambiental (UCOMA) de Madrid. Estos agentes son expertos en incendios. Están trabajando en esclarecer el "modus operandi" del presunto incendiario y en localizarlo.

La rápida intervención de los bomberos, Protección Civil, la Guardia Civil y la Policía Local (con el apoyo de la Cruz Roja) ha evitado que estos incendios calcinen gran superficie. No obstante, no se baja la guardia ya que los de la Rana sí han devastado un paraje de gran valor fluvial, además de dañar seriamente un eucalipto monumental y centenario, los de la Falzia y la Granadella han amenazado enclaves naturales valiosísimos y el de Els Benimadrocs ha arrasado un bosque próximo al parque natural del Montgó.