Lo habitual para «esconder» los muros de los nuevos chalés de lujo es crear un jardín vertical. También se puede recurrir a la solución de siempre de las hiedras y las clemátides, dos plantas trepadoras y tapizantes (hay que podarlas a menudo ya que crecen sin freno). Pero en uno de esos nuevos chalés de moderno diseño de la cala de la Barraca de Xàbia se ha optado por una «solución» más naíf y barata. Los muros se han intentado disimular pintando a brochazos bosquejos de árboles. La pintura verde oculta un tanto la ladera gunitada de esta ladera. Pero los toscos dibujos no dejan de llamar la atención. Los árboles de pega sí dejan ver el muro.
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