Xàbia ya tiene luz verde para gestionar el faro del cabo de Sant Antoni, encendido en 1855 y que hace muchos años que está deshabitado. El presidente de la Autoridad Portuaria de Alicante, Juan Antonio Gisbert, y el alcalde de Xàbia, José Chulvi, formalizaron ayer la cesión de este histórico edificio al ayuntamiento. La concesión es por 15 años prorrogable a otros cinco. El consistorio convertirá el faro en un centro de interpretación de la reserva marina y del parque natural del Montgó.
El consistorio ya tiene las llaves del faro, que mantendrá, claro está, su función de alumbrar el camino de los navegantes (las señales luminosas llegan a las 26 millas). El anteproyecto del centro de interpretación está redactado. Se rehabilitarán la antigua vivienda del farero y el taller y almacén.
El alcalde agradeció la colaboración de la Autoridad Portuaria a la hora de facilitar los trámites administrativos que inició hace dos años el ayuntamiento para lograr la concesión y permitir que este emblemático edificio tenga uso público.
